“Ecos” después del Retiro de Cuaresma del sábado día 12 de marzo
1.- Paco, Gaetan: muchas gracias por el retiro de esta mañana, ha sido una experiencia muy bonita de convivencia parroquial. Me llevo un montón de notas para la reflexión sobre la santidad como pueblo, la esperanza y el sentido de la cruz en la salvación. Hemos estado muy bien. Nadie quería marcharse y se ha pedido repetición.
El Vía Crucis de ayer viernes con los niños también estuvo muy bien. A los niños les gustó mucho y mostraron curiosidad. También podemos repetir, (a la próxima intentaremos llevarnos la canción aprendida). Muchas gracias.
[una catequista]
2.- Hoy se ha hecho el retiro de Cuaresma en nuestra parroquia: creo que la opinión general del grupo que hemos asistido ha sido muy positiva.
Ha resultado muy bonita «la primera parte» con la intervención de nuestro párroco y el tiempo que hemos dedicado a la reflexión en la adoración del Santísimo.
Después, en un receso en el que hemos tomado un pequeño desayuno, nos hemos sentido en familia, aunque algunos no nos conocíamos nada más que de vista. Después el padre Gaetan nos ha hablado de un tema: la Cruz, que nos ha invitado a volver a reflexionar y participar con nuestras inquietudes y experiencias.
[una voluntaria de Caritas]
3.- El sábado 12 de marzo tuve oportunidad de participar, como la mayoría de vosotros, en el retiro de Cuaresma que tuvo lugar en la parroquia. Mi impresión personal es enormemente satisfactoria. Os explico las razones.
En la primera parte, celebrada en el interior del templo y después de la Eucaristía, el párroco, D. Paco Tomás, nos explicó el contenido del mensaje de Cuaresma del Papa Francisco, destinado a renovar nuestra fe para poder acoger la Verdad, nuestra esperanza para poder continuar nuestro camino y nuestra caridad para expresar esta fe y esta caridad con el prójimo. Yo pensé que estas tres virtudes formaban como una trinidad. Después tuvo lugar la exposición y adoración del Santísimo, ocasión para el diálogo con Cristo Eucaristía. Todo con mucha espiritualidad y recogimiento.
La segunda parte se realizó en el salón parroquial, donde un cafetito nos hizo entrar en calor. Allí, el vicario parroquial D. Gaetan nos habló de la cruz de Cristo, escándalo para no creyentes y misterio de salvación para los cristianos. Ilustró el tema con algunas de sus experiencias como capellán de hospital: los creyentes afrontan el dolor y la proximidad de la muerte con paz interior. Se abrió el diálogo para compartir, lo que me permitió poner en común el tema de la esperanza y cómo alimentarla. La comunión eucarística fue una de las respuestas.
Finalizó con un diálogo personal entre nosotros.
La opinión mayoritaria era que había que repetir actos como estos.
4.- La jornada me permitió compartir experiencias personales con una persona con la que no hablaba desde hace algún tiempo. Fue muy enriquecedor.
[un participante asiduo a la Misa diaria]